Ya conocéis lo delicioso que es el bacalao. Tanto en Europa como en el resto del mundo este pescado ha sido el protagonista de muchos platillos principales en los restaurantes más famosos y sobresalientes. Es muy fácil de preparar en cualquiera de sus presentaciones, pero hoy os explicaremos como lo podéis hacer rebosado y crujiente (También llamado soldadito de Pavía).
Lo que queremos lograr con esta receta es que el bacalao quede jugoso y crujiente al paladar y para lograr esto nuestro bacalao debe ser de calidad, y los pedazos del mismo deben ser lo suficientemente gruesos.
En lo que respecta al crujiente envoltorio, su mezcla debe ser espesa, pero no tanto, para que pueda quedar dorado por fuera y perfectamente cocinado por dentro. En este aspecto hemos de tener mucho cuidado ya que la textura depende de que lo hagamos correctamente.
Podéis utilizar el bacalao fresco o desalado, si quieres usar este último debes asegurarte de quitarle la sal por completo. Para que no os compliquéis en esto te explicamos el proceso a continuación. Antes algunos datos de la receta:
- Cocción: 10 minutos
- Elaboración: 20 minutos
- Tiempo total: 30 minutos
¿Cómo desalar el bacalao?
El bacalao naturalmente es un pescado extremadamente salado, y si no pasa por el proceso de desalado no va a poder ser parte de un plato excelente pero no solo eso, para aquellos comensales que sufren de hipertensión será simplemente peligroso. Es por eso que quitarle la sal es un proceso obligatorio.
El proceso para quitarle la sal al bacalao es algo muy sencillo. Es importante que te asegures de quitarle toda la sal al pescado y eso solo lo puedes hacer con mucha agua y mucho tiempo.
En un bol lleno de agua coloca el bacalao a remojar hasta el día siguiente y luego, al final, verifica que la sal se haya removido en su totalidad.
Durante el proceso de remojo del bacalao debes cambiar el agua de cada 5 a 8 horas para garantizar que la sal salga por completo del bacalao.
Ingredientes que necesitaras para preparar el bacalao rebosado crujiente
- Bacalao 500 g
- Un huevo.
- Harina de trigo 100 g
- Sal
- Perejil
- Diente de ajo
- Levadura 1 cucharadita
- Cerveza 50ml
- Aceite de oliva
Preparación del bacalao rebosado crujiente
Para cocinar este platillo vamos a valernos de los lomos del bacalao ya que es la parte más gruesa, ya una vez seleccionada sigue los siguientes pasos:
Paso 1: Corta el bacalao
Tienes que asegurarte que los pedazos sean lo más uniformes y que sean lo suficientemente gruesos para que percibas mejor el jugoso sabor del bacalao.
Paso 2: Realiza la mezcla para rebosar el bacalao.
Coloca en una taza el huevo batido junto con el diente de ajo triturado, el perejil y la mitad de la harina y la levadura. Añade la cerveza y bate hasta que consigas una mezcla homogénea. Podéis ir añadiendo el resto de la harina poco a poco hasta que formes una crema espesa.
Paso 3: Prepara la sartén
Ten a la mano una sartén y vacía el aceite de oliva en ella. Luego calienta la sartén a fuego medio-alto.
Paso 4: Fríe el bacalao
Rebosa los trozos de bacalao con la mezcla preparada anteriormente y fríe cada pedazo por un periodo de 2 minutos aproximadamente o hasta que veas que se empieza a dorar y este crujiente.
Paso 5: Servir con tu acompañante favorito
Puedes acompañar tu bacalao con alguna ensalada o mézclum de verduras y disfruta de este delicioso platillo.
Con los ingredientes que te hemos mencionado y los pasos a seguir podrás preparar el bacalao rebosado crujiente sin problemas, pero para garantizar el éxito de tu preparación toma en cuenta esto:
- El fuego debe estar en un punto alto, en caso contrario puede que el bacalao se embadurne de aceite y sea un poco desagradable.
- La crema en la que vas a envolver el bacalao debe estar espesa pero no tanto. Esto para que al final quede crujiente.
- Escurre lo suficiente el bacalao luego de sacarlos de la sartén. De esta manera el aceite no opacará lo crujiente y podrás percibir mejor su textura y sabor.
El bacalao posee un nivel muy bajo de calorías, característica que lo hace ideal para las personas que están a dieta y si bien es cierto que en esta receta lo freímos con una envoltura de huevo y harina (cosa que no se considera tan saludable) las porciones no son tan grandes, lo que significa que al acompañarlo con una buena porción de ensalada lograras el equilibrio en el plato.
Ya puedes lanzarte a la cocina para preparar este platillo exquisito con uno de los pescados más usados en los restaurantes españoles y a nivel internacional.